domingo, 26 de febrero de 2012

15 Relatos de autor

A principios de este mes de febrero el amigo Juanan propuso hacer un libro electrónico al que cada socio del Club de LEA aportaría un relato breve, y publicarlo conjuntamente en Kindle-Amazon. La idea nos entusiasmó y durante tres semanas hemos estado preparándolo. La participación fue completa: catorce de los dieciséis integrantes del Club se han unido al proyecto. Faltaron Clarinete, ausente de momento por felices causas familiares, y Sergio, por motivo similar.

Sumario

• La sirena,  por Belén Garrido Cuervo
• El crisol de los deseos, por Ricardo Durán
• La elegida, por Lautaro Volpi
• Comiendo diferente, por Maritza Soler
• Amores de sangre, por Antony Sampayo
• Dos, Tres, Uno, por Eduardo Krüger
• Diario de un suicidio, por José García Montalbán
• Katty por Blanca, Miosi
• El libro de la Verdad, por Alejandro López Fernández
• Indios y vaqueros, por Milagros García Zamora
• Rezos infantiles, por Jessica Castro
• Osiris, por Juan Antonio Marín
• Las dos Elenas, por Mario Archundia
• Jonás, por Mario Archundia
• La decisión, por Fernando Hidalgo

Desde hoy 26 de febrero nuestro e-book está disponible en Kindle Amazon. Os invitamos a conocerlo:

En Amazon.es:


En Amazon.com:



Nuestro agradecimiento a Rosa Osuna por su magnífica portada.

domingo, 19 de febrero de 2012

Mujer del sur

Mujer del sur

A su paso deja estelas
de sensualidad, erotismo,
sus carnes morenas,
me llevan al encuentro
de la tierra caliente
del sur.

Sus duras caderas
ondulan mis deseos,
el talle no grueso,
no delgado
engruesa las miradas
de la gente concurrida
a este momento
de éxtasis sexual.


Su cabello negro
cae a los hombros,
como la noche
a la tarde
sus ojos son luceros
oscuros.

¡Oh mujer aborigen!
En tus pechos prietos
se acurrucan mis fantasías,
mis desvelos nocturnales.

Cual bella estampa
de mi tierra virgen
inhóspita, salvaje
semejas a las montañas,
los valles, los ríos
y los caminos que cruzan,
en tu memoria están clavados.

Tu piel huele a limpio,
a las mujeres de tu pueblo,
callado y despierto;
vivo, lleno de colorido
ancestral,
pasado que nunca muere.

Pues al parir sus mujeres
nace su historia.